Seguridad en el Airsoft: Normas y Recomendaciones

¡Hola a todos!

Creo que es buen momento para hacer un recordatorio de un tema importante. El pasado fin de semana fui testigo de un doloroso accidente. Inofensivo, si, pero doloroso. Consistió en un rafagazo a bocajarro en el costado de un compañero mientras ambos guardaban las réplicas. Estos accidentes no suponen un peligro crítico, y todo jugador a lo largo de su carrera al menos una vez es testigo, o provoca, o sufre, algún incidente similar. El caso es que el presenciado este pasado fin de semana no llegó a nada, por el vínculo familiar y amistoso entre ambos jugadores, pero comprendo que si lo sufres en tu propia piel te den ganas de… @&%#!!! al causante del accidente, y no dudo que haya sido motivo en algunas ocasiones de trifulcas entre compañeros de afición. Y debemos recordar que aquí no estamos para eso. El Airsoft es un deporte de caballeros y una afición social sana y pacífica. No podemos permitir que ciertos descuidos la estropeen.

Por suerte o por desgracia estamos algo separados del mundo de las armas de fuego, ya que la normativa de aire comprimido no incluye las estrictas normas y licencias que requieren otras categorías, dado que tanto el calibre 4,5 como nuestro arsenal de 6mm no es verdaderamente peligroso. Y por tanto los jugadores de Airsoft no estamos obligados oficialmente a pasar por ningún proceso de formación sobre el uso, mantenimiento y seguridad de las armas, aparte del que podemos encontrar en las normativas de los diversos clubes y asociaciones, el consejo y guía de otros miembros más veteranos de la comunidad, las instrucciones que vienen con las réplicas, y guías como la presente.

Las típicas recomendaciones de seguridad que nunca nadie se lee.
Tú tampoco te las has leído… Y LO SABES.

Será por que soy tirador con licencia de armas de fuego y socio de la Asociación Nacional del Arma y estoy acostumbrado a las medidas de seguridad de estas (aunque por los campos de tiro de la España profunda se ve de todo, qué país… y luego nos quejamos), pero mi honesta opinión es que esta guía debería ser como los Mandamientos o la misma Biblia del Airsoft, y todos los jugadores deberían predicarla a los que están empezando. No hay que exagerar y hacer pasar por exámenes, pero si que deberíamos dar los veteranos un cursillo a todos los novatos, y corregir a los compañeros cuando observemos acciones incorrectas. En serio que el seguimiento responsable de estas normas no solo puede evitar accidentes «graciosos» como el citado arriba, sino también otros peligros más graves.

Hacer el tonto está muy bien y son unas risas, pero no lo recomendamos.

Mi consejo es que MEMORICEN las 4 Reglas de Cooper y las repitan como loros a los nuevos compañeros (y los viejos también) hasta cansarlos. Las normas generales deberían ser leídas y comprendidas por todos los jugadores nuevos.

GUÍA DE SEGURIDAD

PARA ARMAS DE AIRSOFT

REGLAS DEL CORONEL COOPER PARA LA SEGURIDAD EN EL USO DE RÉPLICAS

Jeff Cooper, creador de la técnica moderna de pistola

En las asociaciones, clubes, y otras comunidades organizadas de usuarios, tanto de armas de fuego como de aire comprimido, se siguen siempre varias normas básicas de seguridad que sirven para minimizar la posibilidad de accidentes. Estas normas normalmente son impartidas por los instructores y constantemente recordadas a los usuarios. Todo usuario de réplicas debe memorizarlas y aplicarlas en todo momento. Hay muchas variaciones pero las más conocidas son las del Coronel Jeff Cooper, que hemos modificado un poco para hacerlas más claras.

1. Todas las réplicas deben ser consideradas como cargadas en todo momento.

2. Nunca permita que el cañón apunte a elementos que no se desee dañar o destruir.

3. Mantenga su dedo alejado del disparador (gatillo) hasta el momento de apuntar al objetivo.

4. Asegúrese de apuntar al objetivo correcto y tener claro lo que se encuentra tras él.

RECUERDE: un accidente es siempre el resultado de no cumplir estas reglas de seguridad. La prevención de accidentes es responsabilidad del usuario.

Comparte este artículo con tus compañeros. ¿Quién sabe? Puede que te hagas un favor a ti mismo.